Hoy tenemos en el blog la visita de Pilar Rodríguez del blog Criando a mi cría que nos va a contar algo muy interesante para nuestros niños: «Cómo hacer un masaje relajante correctamente a un niño inquieto», estoy segura de que sus consejos nos van a ser muy útiles.

Nadie puede discutirme sobre los beneficios que aporta el contacto físico con los niños. Una caricia, un masaje, un abrazo,  aumentan su autoestima, le hacen sentirse seguros, queridos, importantes. Y es por ello que se debe fomentar todo tipo de contacto entre padres e hijos, en juegos, mimos, cosquillas, masajes etc
Cualquier masaje es bueno, pero si lo que perseguimos es relajar al niño para dormir deberíamos seguir una norma básica y no muy conocida.
¿Masaje ascendente o descendente?
En la Medicina actual, los masajes en las piernas, se recomiendan ascendentes con la idea de mejorar el retorno venoso y así favorecer la circulación sanguínea. Pero nos estamos olvidando de la Energía del niño.
Habitualmente los niños tienen dos tipos de Energías:
  • Una Energía muy fuerte, o Energía ascendente dispersa, es un niño muy activo que corre, juega, salta. Y por lo tanto a la hora de ayudarle a relajarse, son las piernas en las que deberíamos concentrar la atención.
  • Una Energía descendente y concéntrica cuando un niño es muy tranquilo y es la espalda la que podríamos acariciar para ayudarlo a dormir.
Si tu hijo es de los primeros, un niño muy activo, la dirección del masaje debe ser siempre descendente, ayudando así a la liberación de la energía hacia la Tierra. 
Técnica muy sencilla de masaje para liberar energía.
Lo primero de todo la luz, el ruido ,y todos los estímulos deben disminuirse un tiempo considerable antes de decirle al niño o bebé que es la hora de descansar.
Tu Energía a la hora del masaje es muy importante. Con tu sóla presencia canalizas tu energía hacia tu hijo, por lo tanto hacer varias respiraciones profundas pueden ayudarte a que tu estado sea el adecuado.
Cumpliendo estas dos cosas ya tienes mucho ganado.
Ahora puedes proceder a darle el masaje tranquilamente en la cama.
Para ello, una vez tumbado, coloca tu manos alrededor del muslo y presiona, mantén y suelta despacio.Coloca la mano unos centímetros más abajo y repite. Desde el muslo hasta el pie. Y vuelve a subir y repite, y luego pasas a la otra pierna. Siempre de arriba abajo.
Si por el contrario hicieras el masaje es ascendente, no permitirías que la energía del niño, o bebé se liberase y hasta es posible que tu masaje le pusiera más inquieto.
Te animo a que lo pruebes y me comentes si notaste el cambio de Energía en tu hijo.
¡Muchas gracias¡