Hoy quiero hablarte de los niños de alta demanda y el AMOR, así con mayúsculas, porque no hablo del amor a su madre que es muy intenso y grande, o a su padre o a su hermanos. Hablo del AMOR.
¿Te imagins a tu niño con esa intensidad que lo caracteriza enamorado? Pues yo no lo tengo que imaginar porque lo estoy viviendo y es que mi niña está enamorada.
A sus 6 años ya tiene dos historias en su vida, y es que sus emociones son intensas siempre.
El primer amor no fue correspondido, y es que con solo 3 añitos se declaró a su mejor amigo con el que compartía muchos juegos. Sin que ninguno nos lo esperasemos le dijo: ¿Te quieres casar conmigo? Tendríais que haber visto nuestras caras y las de sus padres, jajaja. Pero incluso al niño le impresionó y le contestó algo así como que tenía que irse a jugar. Durante un par de meses su relación se volvió «rara» y se les veía diferentes, pero volvieron a recuperar su antigua amistad que aún hoy conservan.
Pero a principios de este año conoció a un niño con el que enseguida congenió y poco a poco se fueron haciendo más amigos y ……en esta ocasión el niño sentía lo mismo, y es que es un niño muy especial, se parecen en muchas cosas y yo creo que por eso han congeniado tan bien.
Ahora ya son oficialmente «novios» y tendrías que ver a mi hija los viernes que tiene una actividad a la que asisten los dos, cómo se viste guapa porque va a ver a su «novio», o cuando se pone el collar que le regaló por su cumpleaños para acordarse de él, o cuando le hace dibujos cuando está malito y cómo se preocupa por él.
Os aseguro que las cosas que dice son dignas de un adolescente enamorado y eso me lleva a pensar dos cosas:
- Con esa intensidad emocional y esa sensibilidad ¿cómo serán sus relaciones con el otro sexo? Me da miedo que lo pase mal, pero supongo que salvo acompañarla y aconsejarla cuando lo necesite y me lo pida, poco más podré hacer.
- Ya tiene 6 años y no me he enterado. Antes de que me de cuenta habrán pasado otros 6 y ahí sí que estaremos en plena adolescencia con unos problemas que seguramente los que tengo hoy me provoquen risa, y ¿sabes qué? que quiero disfutar de mi hija cada momento, porque esto corre demasiado y no quiero perderme nada. Ahora me agobia muchos días la situación, el no tener tiempo, el no poder con todo…pero creo que antes de lo que me gustaría, ella preferirá estar con otras personas y yo echaré taaaanto de menos esto.
Así que he decidido aprovechar cada momento, y como hoy es lunes nos vamos a la biblioteca dando un paseo para tener ese momento especial de conexión en el que ella se muestra tal y como es: MARAVILLOSA.
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