Te quiero hablar hoy de una nueva característica de los bebés de alta demanda:

 

PIEL CON PIEL: No les basta con que mamá esté cerca, quieren tocarla, así que quieren brazos, dormir con ella… extraen del entorno el máximo contacto físico posible

 

La necesidad de contacto físico de estos niños es enorme, durante el día y también por la noche.

 

Por el día no podía dejarla ni un segundo para ir al baño, si se dormía en mis brazos no podía dejarla en ningún sitio. Recuerdo que la gente me decía que no podía pasarme todo el día con la niña en brazos. Pero qué otra cosa podía hacer. En cuanto la dejaba se ponía a llorar desesperadamente y no se calmaba con nada. Incluso a veces no se calmaba cuando la volvía a coger.

 

Al principio me sentía fatal, hasta que empecé a entenderla, para ella era una necesidad no un capricho.

 

Así que empecé a buscar maneras para que estuviese siempre lo más pegadita a mi.

 

Encontré que había muchos tipos de portabebés que me permitían llevarla junto a mi sin sobrecargar mi espalda. Así ella iba feliz, y yo también.

 

Por la noche siguen necesitando ese contacto físico, necesitan tocarte mientras duermes.

 

 

Hoy con casi 5 años, sigue necesitando mucho contacto físico. Cuando se desborda te pide un abrazo, para dormir necesita que esté cerca.

 

Gracias a ella, yo que antes no me consideraba especialmente cariñosa, ahora me paso el día abrazándola y he descubierto lo poderosos que son los abrazos, cómo te llenan de energía, de paz, de tranquilidad.