Los bebés, sobre todo los primeros meses son totalmente dependientes de sus padres, requieren atención continua para atender sus necesidades de alimento, higiene, estímulo, contacto….

Cuando los bebés tienen cubiertas sus necesidades se quedan tranquilos y puedes dejarles un rato en la cuna durmiendo, en la hamaca o en el cochecito y tú puedes relajarte un poco.

Esto no es así en el caso de los bebés de alta demanda que requieren atención las 24 horas del día. No hay ni un solo minuto al día en el que puedas dejarle dormido o entretenido con un juguete y tú puedas descansar.