En primer lugar si me estás leyendo, quiero saludarte porque hace tiempo que no paso por aquí.
En segundo lugar quiero pedirte disculpas por mi ausencia. Las circunstancias que rodean mi vida últimamente me han tenido atareada, preocupada y más dispersa de lo que me hubiese gustado. Realmente no era consciente del tiempo que llevaba sin escribir hasta que me he fijado en la fecha del último post. El tiempo se me ha pasado volando y me siento mal por no haber estado aquí cuando lo has necesitado. También te pido disculpas si te has intentado comunicar conmigo por algún medio y no has recibido respuesta. Tengo muchísimos correos, comentarios y mensajes que no he podido revisar.
Mi vida en los últimos tiempos ha cambiado mucho, ha dado un giro de 180º y yo también he cambiado. Ya no soy la misma de antes. Ha cambiado mi situación personal, mi organización familiar, mi manera de ver la vida y de afrontar lo que la misma nos depara cada día, mi conocimiento sobre mis emociones y sobre mí misma, la situación escolar y emocional de mi hijos, y tantas cosas que me gustaría compartir contigo, tantos aprendizajes importantísimos para afrontar esta Crianza de Alta Demanda en la que no solo descubrimos la mejor manera de actuar con nuestros hijos, sino que nos descubrimos a nosotros mismos, y eso es algo tan valioso que me encantaría que siguieras a mi lado en este camino de descubrimiento para que tú también puedas avanzar y crecer conmigo, con tus hijos y aumentar tu felicidad y la de los tuyos.
Para empezar este nuevo camino necesito resetear, dejar atrás lo «viejo» y empezar de cero con lo «nuevo», así que en las próximas semanas se irán produciendo algunos cambios que configurarán el inicio de esta nueva etapa en la que espero que me acompañes.
¿Estás lista para darle al RESET conmigo? 😉
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